Las fiestas de barrio, supeditadas a la crisis

Mucho se ha hablado en las últimas semanas sobre si las verbenas de barrio se celebrarán o no. Pues bien, una vez consultadas las asociaciones, de la treintena de ferias que, año tras año, se organizan en la capital tan sólo cuatro no se convocan y, aun así, hay que detallar muy bien los motivos.
No es un hecho puntual jiennense. Todo lo contrario. Se convierte en una tónica de todo el país el hecho de que fiestas y verbenas, este año, estén supeditadas a la recesión económica que, desde hace veintiún meses vive España. Y es que nadie puede ni quiere evitar evocar esa bella estampa estival de farolillos que, durante unos días, forman parte de la decoración de calles y plazas, y por eso, agotan esfuerzos para que esta popular tradición, tan arraigada por todos los rincones de la geografía nacional, no se pierda. El motivo fundamental para que sigan adelante no es otro que los propios vecinos y el sudor de su frente. Muchos de los colectivos se echan la crisis a las espaldas y deciden tener sus fiestas de barrio, aunque lo harán de manera un tanto “light” porque, como dice el refrán, no está el cuerpo para muchas de estas celebraciones.

A bombo y platillo se anunciaba el peligro que acuciaban a estos festejos y, ahora, de las 31 celebraciones de Jaén, tan sólo cuatro no se realizarán. La anulación más sonada es la de “San Eufrasio”, más conocida como las fiestas de Las Protegidas. El presidente de la asociación de vecinos, Amador Espejo, asegura que la falta de respaldo de los empresarios es lo que ha provocado esta triste decisión. Y es que la subvención que reciben del Ayuntamiento no es suficiente para hacer frente a todos los gastos que supone organizar unas ferias de esta categoría. Pero hay que recordar que no es la primera vez que se suspende esta fiesta —una de las más importantes de la capital—. Espejo recuerda que en 2008 tampoco se realizó y que hace cinco o seis años pasó tres cuartos de lo mismo.

Harina de otro costal es el que se vive asociaciones como San Vicente de Paúl y Faldas del Castillo. En ambos casos, las verbenas populares hace años que no se organizan y por lo tanto el anuncio de este temporada no ha pillado por sorpresa a los vecinos de las dos zonas.

Pero, sin duda, la fiesta que más revuelo ha generado son las del barrio La Glorieta. La anulación suscitó la confrontación entre los colectivos que se ven directamente vinculados. Mientras que la Asociación de Vecinos La Gloria aseguraba que no iba a convocar los festejos, algunos particulares decían que ellos, a título personal, sí las iban a hacer. Mientras, se señaló al colectivo cultural La Mella como el presunto organizador de las celebraciones y, rápidamente, lo desmintió. Ayer llegó el día indicado y lo que pasó es que algunos vecinos “montaron la fiesta” por su cuenta por lo que salvaron la celebración. De esta manera, el paso del Cristo de los Charcales no se deslucirá este domingo y, como manda la tradición, es recibido por los vecinos.

Pero, ¿dónde radica la disputa? La junta directiva de OCO (Objetivos Comunes) anunciaba, hace unos días, en un comunicado, el acuerdo alcanzado con la Concejalía de Participación Ciudadana, por el que ésta se compromete a pagar el coste de las ferias de barrio. Concretamente, destinarán 3.021 euros cada una. Se informó de esta novedad y el presidente de la asociación La Gloria recordó que, en realidad, son necesarios doce mil euros y que ellos, después de la reparación de la sede, no tienen fondos para afrontarlos. Sin embargo, los miembros del colectivo sí anunciaron que, a nivel particular y no como asociación, ayudarían a todo aquel vecino que estuviera dispuesto a hacer algo. Y así, desde el viernes, algunos residentes en el barrio festejan, a su manera, la primera de las verbenas de la capital.

Fiestas light. ¿Pero qué pasa con todos aquellos que sí han decido organizar sus festejos contra viento y marea? Pues eso, que lo hacen con todas las consecuencias y, en algunos casos, pasando más que una penuria. Por eso, muchos de los colectivos de residentes han optado por mantener las verbenas pero a “bajo precio”, es decir, algo más descafeinadas que otros años. Así lo comentaban, por ejemplo, representantes de “Cerro Molina”, “Caude” o “Ariete”. En el caso de “Loma del Royo”, también se anuncia que las celebraciones se organizarán, de acuerdo a lo previsto, a finales de mayo, pero que serán mucho más modestas que en ediciones anteriores.

Y es que igual que en el resto de la provincia, las romerías y las fiestas locales se suceden, en el caso de Jaén pasa algo muy similar. Desde este mismo fin de semana, y hasta bien entrado septiembre, todos los sábados y domingos están ocupados con celebraciones de los barrios.

Por otro lado, hay que estar alerta ante el aumente de billetes falsos. Este tipo de práctica se hace más habitual en las verbenas y, por eso, los colectivos de consumidores piden precaución tanto a vecinos como a hosteleros para que los billetes falsos no circulen por estas barras.

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