Generación JASP o INEM

¿Recuedan aquella frase que tan famosa se hizo, a mediados de los años noventa, con la campaña publicitaria del Renault Clio? Jóvenes pero sobradamente preparados y, ahora, en la puerta del INEM. Hasta hace un par de años, antes de que azotara al país, a Europa y al mundo entero, la famosa recesión económica, si usted buscaba trabajo, era joven, poseía una sólida formación académica y contaba con un título de posgrado y dominio del inglés, las empresas se lo rifaban. Muchos meses después, si cumples con estos requisitos, la cola del paro es tu mejor destino.
En este país, los más jóvenes no trabajan ni tiene perspectivas de hacerlo en un futuro inmediato. Lejos de ser la fuerza que levante la economía y consiga acabar con esta perversa crisis, se han convertido en la generación INEM. Una generación desesperada, que no ve salida al túnel y que, día tras día, se arrepiente más de dedicar toda su juventud a prepararse para acceder al mercado laboral y toparse con la cruda realidad: universitarios hay muchos y empleo ninguno. Nos encontramos ante una de las generaciones mejor preparadas de la reciente historia de España. Muchos de los que han obtenido trabajo lo hacen en puestos muy por debajo de su cualificación profesional. Estos jóvenes, dentro de un tiempo, ya no lo serán, y no habrán podido llegar tan lejos como en otras circunstancias de mejor tesitura económica les hubiera permitido. Será una generación sobradamente preparada para volar muy alto, pero que el mundo le ató las alas muy pronto, y se transformará en lo que pudieron ser y no fueron. Esto, a medio plazo, lo pagará el país, a nivel de investigadores, de progreso, de innovación, de eficiencia, de cultura. Porque esto será España. Un país en el que ganaba más un albañil que un profesor de universidad. Donde el ladrillo y la banca se volvieron contra el ciudadano y lo hundió, acabando con los sueños de toda una generación inútilmente preparada que ahora no tiene dónde trabajar.
Pero todavía hay un poco de esperanza. Una luz al final del túnel. La linterna es, precisamente, esta nueva tecnología que nos permite comunicarnos y conocer la actualidad con una inmediatez que ni la velocidad de la luz ofrece. Un buen número de jóvenes emprendedores se han hecho millonarios vendiendo sus proyectos en internet y, aún así, no han abandonado la aventura de seguir innovando con nuevos servicios. Noticiasdot.com cita, por ejemplo, a Max Levchin, fundador de Paypal y después de Slide Inc; a Evan Williams de Blogger y luego de Odeo; a a Janus Friis y su socio Niklas Zennström con Kazaa, Skype y más tarde Joost, y, también, a Martín Varsavsky, de Jazztel, ya.com y FON. Estos son jóvenes sobradamente preparados.

No hay comentarios:

Publicar un comentario